Piedra

Te has convertido en una piedra, que se esconde tras el barranco de emociones. Nada te influye porque estás muerta. Cargas, el peso de la no expresión sobre tu erguida espalda. Muda de sensaciones. Vedada de sentir. Y no estas feliz porque elegís no estarlo. Te gana el miedo y la incertidumbre. Si escucharas a tu corazón, te ablandarías, pero fijas tus prioridades en el ruido de la superficialidad. Si expandieras el amor, descubrirías que las personas de hierro, resultan una imagen falsa. Quizás, debes enaltecer tu espíritu noble. No la pared que construiste como refugio para que nadie te revele. Yo también, era una piedra, sin embargo las máscaras finalmente caen. Ahora, mi mirada recubre más brillo. La plenitud viaja por los átomos. Y mis células tan solo reúnen amor. No  pierdas más tiempo siendo piedra. Porque te estás olvidando lo más imprescindible: VIVIR en armonía.